Por Pablo Solovera
Reparto: Harrison Ford, Omar Sy, Cara Gee, Karen Gillan, Dan Stevens
Dirección: Chris Sanders
Clasificación: TE +7
Duración: 1h 40m
Sinopsis: Basada en la aclamada novela de Jack London, “El llamado de la naturaleza” cuenta la historia de Buck, un perro cuyos instintos primitivos vuelven tras una serie de sucesos que le ocurren cuando lo ponen a tirar de un trineo en el Yukón durante la fiebre del oro que tuvo lugar en el siglo XX en el Klondike, durante la cual los perros de tiro se compraban a precios elevados.
En un mundo en el que el cine está tomando un rol cada vez más social, “El Llamado Salvaje” no viene a entregar un gran mensaje a analizar dentro de su profundo subtexto. No, la última película de Sanders quiere simplemente mostrarnos una gran y entretenida aventura, protagonizada por el mejor amigo del hombre: un perro.
Cuando toca adaptar un libro centenario, el desafío es grande, pero las libertades también. La novela corta lanzada en 1903 por Jack London cuenta una historia similar a la de la película, pero mucho más brutal, que aquí ha sido adaptada a un público más familiar. La historia se centra en Buck, un gigante perro que es sacado de su mundo y llevado a vivir una aventura inesperada en donde deberá escuchar el llamado de lo salvaje. Durante los primeros minutos de la película, lo primero que golpea un poco es el CGI, que no logra convencer, pero tras veinte minutos logras olvidar eso debido a la fluidez de la historia y puedes ver a Buck, un perro totalmente digital, tomando vida, emociones y motivaciones, sin caer en lo caricaturesco, pero al mismo tiempo trayendo esa magia de la animación que no busca ser totalmente realista. Esa misma magia se traspasa a la narrativa misma, en donde el paisaje casi onírico de Alaska se convierte en el escenario de una fantástica aventura donde la dinámica entre sus personajes humanos y caninos se ubica en una delgada línea entre la verosimilitud y una especie de realismo mágico, en donde nadie cuestiona su relación.
Las distintas historias y aventuras que Buck vive en el transcurso de la película podrían sonar excesivo, pero es, nuevamente, el fluido ritmo que ayuda a que una transición a otra sea rápida y lógica, jamás cuestionando su sentido ni dirección, pero tampoco siendo predecible en lo más mínimo y manteniéndote interesado, entretenido e inmerso en la historia de principio a fin.
El casting humano funciona muy bien. La actuación de Omar Sy como el carismático Perrault recuerda a los clásicos personajes nobles de Disney, y su interacción con Cara Gee es dulce y cautivadora, pero es Harrison Ford el que destaca haciendo el papel que lleva haciendo años: de Harrison Ford, pero calza perfectamente con el personaje de John Thornton y su desesperanza. Ford demuestra que, de ser necesario, puede echarse una película al hombro sin necesidad de contar con nadie más en el set al momento de grabar. Afortunadamente, este no es el caso, debido a que sus interacciones con Buck se ven tan reales que te hace olvidar, nuevamente, que no es un perro real.
Conclusión: la puerta que abre “El Llamado Salvaje” a una narrativa de animación tradicional “a la Disney”, sin dejar de lado el realismo y la verosimilitud, acompañando a humanos en películas de gran presupuesto, da cuenta que la transición desde la animación pura del director Chris Sanders fue una buena elección. Es una película que recompensa tu inversión con una entretenida aventura para toda la familia que, incluso, se queda corta en tiempo pudiendo haber desarrollado quizás un poco más sus ideas.
8/10
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