Por Pablo Solovera
Reparto: Eva Green, Zélie Boulant, Matt Dilon, Lars Eidinger, Sandra Hüller
Dirección: Alice Winocour
Clasificación: TE
Duración: 1h 47m
Sinopsis: Sarah es una astronauta francesa que se entrena en la Agencia Espacial Europea en Colonia. Es la única mujer dentro del exigente programa. Vive sola con Stella, su hija de siete años. Sarah se siente culpable por no poder pasar más tiempo con la niña. Su amor es abrumador, inquietante. Cuando Sarah es elegida para formar parte de la tripulación de una misión espacial de un año de duración llamada Proxima, se produce el caos en la relación entre madre e hija
Hay que decirlo: el cine francés es distinto al cine tradicional que vemos normalmente. Tiene otro ritmo y, generalmente, lo que prima es la intención del artista o el mensaje a transmitir, sin escatimar recursos en escenas largas, en planos muy específicos o en detallar con colores cada momento. “Prometo Volver” tiene todo esto, pero también tiene mucho más, logrando meterse de lleno en una cartelera copada de películas de cine americano, o de géneros más fáciles de digerir y dejando mucho para hablar.
La primera sorpresa es el elenco. ¿Eva Green como una astronauta francesa? Sorpresa: Eva Gäelle Green es francesa, aunque solo haya tenido una incursión en el cine de su país. La actriz que debutó en “The Dreamers” del difunto y polémico director Bernardo Bertolucci no da pie para críticas. En solo sus primeros minutos, la actriz recuerda que debajo de las capas de maquillaje que generalmente la cubren en los roles “Burtonescos” que protagoniza, existe un talento indiscutible y una capacidad de proyectar sus sentimientos solo con el tono de su voz, su postura y su voz. Matt Dillon, su coprotagonista en la película logra hacerle un gran peso en el elenco, manteniéndose lo suficientemente distante como para jamás opacar a Green, pero apoyándola en el desarrollo de su personaje. La dinámica entre Eva Green y su hija fílmica, Zelie Boulant-Lemesle es totalmente natural, realmente viendo a una madre teniendo conflictos con su hija en la pantalla, lo que habla de una prometedora carrera de la joven actriz, y también de la increíble dirección de Alice Winocour.
La segunda gran impresión la causa su nivel de producción. La película está ambientada en varios países, y realmente fue grabada en instalaciones de entrenamiento espacial en Rusia y Kazajistán, su elenco es de diversas nacionalidades, y Eva Green habla cuatro idiomas durante la película (francés, inglés, alemán y ruso), algo a lo que no se atreve cualquier director de cine empecinado en publicitar su película al público extranjero. Se ve que el presupuesto es grande, quizás no comparable a otras películas espaciales como “Gravity”, “Interstellar” o “Ad Astra”, pero no es una película de tono independiente, sin tampoco querer ponerse a la altura de estas en espectacularidad, prefiriendo dejar que sus actores e historia hablen, sin dejar de lado, de todas formas, una fotografía espectacular, con paisajes increíbles que nos harán sentir que estamos ahí. Winocour no tiene miedo de mostrarte que, realmente, dio vueltas por Europa para grabar su película.
La directora francesa no escatima recursos en “Prometo Volver”, de ningún tipo, ni narrativos ni monetarios. Winocour nos cuenta una historia para nada rara en el cine (o en el mundo real): una mujer siendo cuestionada por su trabajo, aunque lo haga bien (o mejor) que sus contrapartes masculinas, teniendo que además balancear su trabajo con sus labores maternales, todo esto empeorado por un inepto exmarido. Nada nuevo, ¿verdad? La gran diferencia entre ésta y otras películas similares es la intención artística detrás de la historia.
Porque, al final, “Prometo Volver” no es una película de astronautas, ese solo es el motor que se usa para su mensaje. Es un íntimo drama familiar de una mujer luchando contra los prejuicios y batallando para ser una buena madre, como se le exige, sin dejar de lado su trabajo. Es una película realista, que con una sutil elegancia ubica el tema en debate. Todo, finalmente, pasa a segundo plano, por la lucha constante de Sarah Loraeu para ser respetada por igual en una sociedad machista que no confía en ella ni en su capacidades.
Mientras avanza la historia, se comienza a plantear si esta dinámica de sociedad es la que queremos llevar al espacio, al futuro, que es donde está el trasfondo del asunto. Se podría culpar a Winocour de que entrando al final de la película, su potente mensaje se va debilitando y perdiendo, pero no es así: lo que se pierde durante el transcurso de la película son las dudas de la capacidad de trabajo de su protagonista, no solo para los espectadores, sino que también para sus compañeros.
Conclusión: “Prometo Volver” es una película con un ritmo difícil para los no acostumbrados al estilo, pero su temática deja esto rápidamente en segundo plano, teniendo un potente mensaje que transmitir positivamente, gracias a su precisa dirección y sublimes actuaciones que recompensan totalmente el largo viaje en el que nos embarcamos con la prometedora directora Alice Winocour.
8/10
Comments